EL VÉRTIGO

“El vértigo es algo diferente del miedo a la caída. El vértigo significa que la profundidad que se abre ante nosotros nos atrae, nos seduce, despierta en nosotros el deseo de caer, del cual nos defendemos espantados” Milan Kundera

El Vértigo

                                               De Armando Discépolo

 

 

El misterio, como señal de nuestras limitaciones, sale de la duda, que  siempre nos  escolta para seguir experimentando. Pero ante el misterio, y ante esa duda, puede surgir una especie de vértigo, esa conmoción de no saber qué hacer, que decidir, para donde ir…Es un momento extremo  que se nos presenta muchas veces en nuestras vidas y que no lo podemos controlar…lo tenemos que transitar…

 

Uno de los mayores dramaturgos argentinos, Armando Discépolo, con mucho acierto supo mostrar la desventura de una sociedad violenta y absurda, en su obra de teatro El Vértigo, ya que a través de la cotidianeidad de los humildes e inmigrantes personajes, podemos ver como el grupo ante el peligro tiene que decidir entre dos opciones, la de huir o atacar… A la par que, a nosotros también nos hace sentir  ese “vértigo” que estamos percibiendo en escena.

 

Estamos frente a la familia Florio, que están viviendo en el taller de platería de Rómulo Corsani (Matías Broglia). Ellos, están agradecidos porque su amigo les brindó hospitalidad, pero cuando se enteraron de cuál era la realidad se produjo un enfrentamiento inesperado. El clima se volvió de hostilidad, de desconfianza, de resentimiento, incentivados por esa gran aflicción de culpa que tiene Miguel (Marcos Horrisberger) por un desliz que cometió y que su hermano de la vida se lo recuerda permanentemente.

 

Los roles adjudicado, nos sorprenden por su fuerte entidad. El elenco, formado por grandes actores, nos deslumbra por su autenticidad. Conocemos a Miguel (Marcos Horrisberger), quien robo por amor y trata de vivir lo mejor posible; a su hermano Carlos (Roberto Cappella), lleno de resentimiento por haber abandonado, obligado, a su patria; a su otra hermana Marisa (Jesica Wejcman), una inocente niña mujer que rompe con los mandatos; la madre (Alicia Naya), que la nobleza le sale por los poros, es una madraza que defiende a su familia a pleno; al primo Silvestre (Martín López Pozzo), cuya sensatez sostiene a todos. Hasta acá, son una familia típica de los años 20, en donde el honor y los deberes prevalecen a los sentimientos. Pero, se le agrega la pasión del hombre benefactor Rómulo (Matías Broglia), un enamorado no correspondido, despechado, cuya ira y la negación de la realidad, hará producir una desgracia. El amor de Madaria (Marcelo Aruzzi), quien de un simple joyero pasó a ser un “chivo expiatorio” para que exploten las pasiones. Y, como siempre, la ambición ronda sus vidas, de la mano de Isabel (Natalia Besuzzo), joven, fresca, tratando inconscientemente de volver a obnubilarlos.

 

Desde el momento, que el hecho teatral  se produce dentro  del taller de orfebrería del maestro Juan Carlos Pallarols, ya nos sentimos en el sitio indicado, con el encuadre perfecto para hacer de ésta puesta una maravillosa creación artística. La decoración, sobresale en realismo gracias al asesoramiento escenográfico y al Vestuario de Cecilia Zuvialde. Tanto  el Diseño de Luces (Miguel Solowej) como  la Música (Santiago Barceló), reflejan el gran trabajo y la dedicación que le han puesto para obtener el máximo resultado. Al igual, que la Fotografía (Leopoldo Minotti), el Diseño Gráfico (Roberto Cappella), el Asistente de Dirección (Juan Sebastian Echave), son partes de un todo en el que la sinergia se aprecia nítidamente.

 

La Dirección de Matías Leites, Leopoldo Minotti, roza lo perfecto. Percibimos, que ambos apuestan a la intensidad del proyecto, estimulando a los ejecutantes a compenetrarse completamente en sus papeles, lo cual lo logran y con creces. Tienen mucha garra para contenerlos y para soltarlos cuando es necesario.

 

Esta muy recomendada, porque es una gran FUNCIÓN DE TEATRO (con mayúsculas), interpretado por artistas de raza que se vuelven nuestros espejos, develándonos que el amor y desamor conviven, que el honor y el deshonor existen y que está en nosotros elegir. Especialmente para un público ávido de argumentos  con mucho contenido, de potentes y apasionados actores en escena y de directores que los abrazan desde el acompañamiento y la emoción.

 

                                                                            Redactora: Estela Gómez

                                                                                                                                     08/04/2016

 

 

Ficha técnico-artística:

Autoría: Armando Discépolo

Actúan: Marcelo Aruzzi, Natalia Besuzzo, Matias Broglia, Roberto Cappella, Marcos Horrisberger, Martín López Pozzo, Alicia Naya, Yesica Wejcman

Vestuario: Cecilia Zuvialde

Diseño de luces: Miguel Solowej

Música: Santiago Barceló

Fotografía: Leopoldo Minotti

Diseño gráfico: Roberto Cappella

Asesoramiento escenográfico: Cecilia Zuvialde

Asistencia de dirección: Juan Sebastian Echave

Dirección: Matías Leites, Leopoldo Minotti

 

Web: http://www.elvertigo.com.ar

 

Duración: 70 minutos

 

MUSEO PALLAROLS

Defensa 1094

Capital Federal - Buenos Aires - Argentina

Reservas: 15-6725-1000

 

Viernes - 21:00 hs

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